Estamos a las puertas del verano, la primavera agota sus días y el ascenso de las temperaturas activa el desarrollo vegetativo de las plantas. Los viñedos lucen una tonalidad verdosa que caracteriza los campos del Bierzo, las laderas, las colinas, y el cuajado de los racimos aventura la próxima cosecha. Es el momento de los nuevos vinos Peique.
Las conversaciones con amigos mientras compartimos una botella de vino en la bodega después del trabajo, la puesta a punto de los sentidos cuando abrimos las botellas de los nuevos vinos o rellenamos la copa directamente del depósito o de la barrica.
El hora de compartir experiencias, los sabores de la Mencía y la Godello que quedarán grabados en la memoria. En Valtuille convivimos unas cuantas bodegas donde el vino es el nexo de unión entre las familias las generaciones pasadas y las que están por venir. Valtuille es un pueblo ligado a la viticultura y a las amistades duraderas a favor del tiempo.
Acabamos de sacar una nueva gama de vinos al mercado. Peique Godello, Rosado y Mencía. Los mismos vinos que llevamos elaborando desde hace unos años en la bodega a partir de las uvas que cultivamos en El Bierzo, pero con un cambio en la identidad visual y conceptual.
En los nuevos vinos Peique, hemos buscado una mayor conexión con la naturaleza, con el entorno que nos rodea y que hallamos en los viñedos del Bierzo cuando caminamos por los caminos, las sendas que comunican el eje que atraviesa los valles y las montañas de la comarca berciana: el Camino de Santiago.
¿A qué saben nuestros nuevos vinos Peique?
- Peique Godello: Amarillo pajizo con reflejos verdosos. Aroma franco e intenso con recuerdos de fruta exótica, flores silvestres y un fondo especiado. En la boca es untuoso, fresco y agradable con un final delicado.
- Peique Rosado: Elaborado con un cien por cien de Mencía. Rosa cereza de intensidad media. Aroma de fruta roja madura, con recuerdos golosos de fresón, picotas y cítricos. En boca es de cuerpo medio, buena acidez, frutal y vivaz.
- Peique Mencía: Elaborado con un cien por cien de Mencía. Color grosella de capa alta. Intensos aromas a cereza y guindas, sobre un fondo de hinojo, violeta y pizarra. En la boca es profundo y vivo, destaca la acidez y el equilibrio, es un vino táctil y carnoso, especiado, con personalidad propia y carácter mineral.
